En casa nos encantan las tartas de queso y esta estilo la viña tenía que caer si o si.
He tardado mucho en hacerla, ya que esta Tarta de Queso es un clásico en la blogosfera desde hace años, pero igual me pasó con la Cheesecake de Tres ingredientes, y para mi sorpresa fue un éxito total, a pesar de que a mi me parecía que podía ser viejuna, pero no, son clásicos que siempre gustan.
La Tarta de la Viña es un secreto bien guardado… o no…porque yo he visto esta receta por toda la red…asi que no se yo si la han guardado bien.
Yo me he basado en la receta de Belen Cupcakes a Gogo…porque de ella me fio yo a base de bien, a parte de ser una amiga muy querida para mi.
La clave de esta tarta de queso y que la diferencia de las tartas clásicas de queso son dos, una la cantidad de grasa que lleva, que es mucho mayor que la de la clásica y que esa grasa viene en un porcentaje superior a de la nata y no del queso y que esté poco hecha, si yo la hubiera sacado del horno 5 minutos antes, hubiera sido un poco mejor.
Amigos, eso es así, la grasa aumenta la palatabilidad es decir el placer que sentimos al comer algún alimento. Así que esta tarta la viña es ultraplacentera.
Es verdad que es muy colórica, pero no creas que mucho más que otras tartas clásicas, ya que no lleva base y tampoco lleva topping, más allá de que quieras ponerle un coulis de frutos rojos con muy poco azúcar y calorías que te dejo más abajo en la receta.
Y además la hacemos un finde que para eso son los findes, y la compartimos con muchos, muchos amigos…jejeje.